
Despierta abre esos ojos.
Sal de tu interioridad.
No estás solo ¿o si lo estás?
Tienes miedo.
Tu relación ya ha caducado.
Ya no crees en amar.
Pero el Amor nunca nos falla,
quizás somos nosotros los que no estamos a la altura de tan sublime acto:
lo envenenamos con nuestro orgullo, vanidad, egoísmo
y falta de sinceridad.
El amor es algo puro y noble que nace de la belleza interior, es algo inocente que requiere el trato de especial o sea un cambio en la forma de ver: dejar atrás esos torpes prejuicios, las malas experiencias que entorpecen el percibir diario, es ver a la gente desde su interioridad para lograr apreciar su verdadera naturaleza.
El amor es permanente y trasciende a lo largo de toda la vida, está presente en donde quiera que miremos, es eso probablemente lo que molesta al común de la gente como yo, que impulsan la creación de duras críticas contra tan digno acto que presenciamos con recelo ante nuestro alrededor.
Pero lamentablemente el amor está siempre allí, continuamente intentando transformar nuestras vidas, llenándonos de ilusiones "falsas”, que nos llena de fuerza, vitalidad y esperanza, una esperanza desoladora que nunca termina, una esperanza eterna, en donde sabemos que es inútil tener esperanza, pero ante tan mal presente y adherentes a la mediocridad de no concretar lo que anhelamos, nos basta llenarnos de esperanza. Aun así no renuncies a tus ideales, ten confianza, date una oportunidad para algo, para hallar ese algo que perdiste.
Es fácil dejarse ir, confundirse, agobiarse, dejarse llevar por el pesimismo. Es fácil sentirse derrotado por las malas experiencias que te endurecen el corazón, pero es la esencia del ser humano querer ser la víctima de una guerra que se perdió ante tan grande poder ,pues son esas actitudes recurrentes del ser débil, el cual añora ser rescatado por su agresor y encontrar cabida en un corazón frio, que no ama.
No huyas de las experiencias dolorosas, afróntalas. Un desengaño te clava una espina que hay que sacar. Con una mirada limpia puedes volver a dejarte sorprender por las nuevas enseñanzas, oportunidades. Sólo así crecerás. Puedes aprender que cuando creemos poseer la verdad en realidad se nos ha escapado y hay que volver a buscarla, pues sabrás que no existe tan verdad pues nadie posee la verdad absoluta de nada.
El miedo te impedirá enamorarte de nuevo, atarte a alguien, confiar en él. Asociarás amor con dolor. Verás negativamente todo lo que conlleva el amor: compartir, aguantar las cosas del otro, convivir con otras opiniones, intereses, valores, preferencias, embarcarte a nuevas aventuras...
No te prives de la libertad. Con miedo nunca serás libre. Sin libertad nunca hallaras tu natural interioridad y no podrás ser feliz ni hacer feliz a nadie. No podrás amar.
La felicidad no es ausencia de compromisos, dolor y ataduras. Pensando que solos seremos más libres es un engaño, un consuelo a la soledad que te ha traído el miedo.
Pero es ahora el miedo mi principal compañero que me aconseja que no vuelva a entregar tan valiosa entrega que no vale la pena, es el miedo el que detiene ahora mi pulso cuando te veo y pausa ese huracán de pasión que se desata al interior de mí, es el miedo que anula mis sentidos para no percibirte, para no oírte y no sentirte, pues es el miedo lo que me hace no pensar en ti, pero es un enigma , porque es por miedo que por ti pienso.